Es una sensación que me resulta muy difícil de describir, la identifico como aquello que hizo que me interesara por la programación. Lo que alimentó muchas horas de estudio, pruebas y aprendizajes. Es ese sentimiento de omnipotencia que te asalta cuando terminas un refactor complejo y pasan todos los test. Es la energía con la que sales de una charla donde has descubierto una nueva técnica, la energía que alarga las charlas sobre código con colegas durante horas.
Ese momento en el que eres consciente de lo mucho que sabes y lo mucho que te queda por aprender.
El hambre de mas retos, mas juegos.
La fascinación ante una solución simple, sofisticada y elegante.
La “alegría de programar” que he ido perdiendo con los años de práctica profesional.
Será que me he hecho más cínico, que he acumulado frustración con la industria y con la sociedad. O simplemente se me han ido oxidando los circuitos de recompensa. La cuestión es que no consigo conectar con esa sensación. La echo de menos.
En los últimos años he disfrutado el privilegio de tener espacio, confianza y recursos a mi disposición para poner en acción mis ideas sobre como hacer software. Ideas que nunca había aplicado en un entorno tan exigente como el de los servicios, con fechas límite contractuales, el constructo hora/hombre como unidad económica, la presión de la cuenta de explotación, la diversidad de proyectos y otras tantas cosas que me alejaron hacia otros espacios como el académico o las startups que me ofrecían más libertad para experimentar.
En este proceso se han producido nuevos aprendizajes, he desarrollado nuevas técnicas y abandonado otras.
En lo organizativo he aprendido a darle máxima importancia al proceso de mejora continua (kaizen) y a cuestionar la organización en equipos fijos introduciendo equipos fluidos que ajustan su ancho de banda y su conjunto de habilidades (skillset) a las necesidades y ritmos del proyecto.
Pude dar continuidad a mi trabajo sobre como enseñar a programar integrando la academia en la empresa con muy buenos resultados tanto económicos como culturales.
En la práctica colectiva ha sido clave aprender a construir un espacio seguro
sobre la ausencia de liderazgo técnico sustituyéndolo por consensos muy amplios. Esto nos ha permitido enfocarnos en pulir la práctica remota de la programación en pareja (pair programming) y aquilatar el valor de las costosas sesiones de programación en grupo (mob programming).
También ha significado muchas horas programando en proyectos diferentes con compañías diversas donde han habido destellos, conexiones y, a veces, solo reflejos en el otro de esa sensación que llamo la “alegría de programar”
Así que me propuse encontrar la manera de disfrutar cada día de programar atendiendo solo a la práctica por la práctica. Estar en el presente, en la acción misma y olvidarme de su utilidad. Deja de importar el valor para el cliente o el usuario. El artefacto resultante es como el sudor al ejercicio.
Programando de manera consciente, sintiendo como impacta en mi realidad mientras estoy en la acción. Expresándome en un diálogo a tres bandas con el problema, con la máquina y con el resto de programadores. La estética del código como objetivo.
Programar proyectando mis valores. Atendiendo con mimo la semántica por que soy un tipo amable que le gusta hablar para que le entiendan no para epatar a los demás. Haciendo test porque soy compasivo, no quiero añadir miseria y frustración a la vida de mis compañeros ni a la mía en el futuro.
Esta “práctica por la práctica” la estoy desarrollando alrededor de una serie de
prácticas deliberadas. Juguetes, pruebas de concepto, ejercicios y katas destinadas a entender como programo, por que hago las cosas como las hago. Prácticas que me ayudan a identificar y desafiar mis dogmas, que me permiten poner en acción algunas ideas radicales solo por ver dónde me llevan.
Me gustaría compartir los aprendizajes de los últimos años y los de este nuevo proceso con vosotras.
Llevo algún tiempo sin interactuar con la comunidad.
Voy a eventos que consumo de manera pasiva donde aprovecho para tener conversaciones con colegas y aunque durante mucho tiempo mi principal forma de compartir fue dar charlas, siento que la relación con el publico es demasiado asimétrica y que el formato solo permite discursos superficiales que aunque resultan interesantes para la divulgación no lo son para tratar temas con profundidad.
Por eso nace esta publicación
Aprovecharé también para recomendaros películas, series, libros, comics , música y personas.
Acabaré con una lista desordenada de links sobre temas variados que me hayan resultado interesantes.
Esta va a ser una publicación quincenal, la enviaré el primero y el quinceavo día de cada mes hasta el mes de Agosto donde decidiré si sigo publicando con la misma cadencia, si descanso durante el verano, si cambio el formato o si ya estoy harto.
He abierto un canal de telegram donde continuar la conversación aunque también podéis hacerlo en twitter o escribirme un correo.
¿Cómo identificáis vosotros esa alegría de programar?
¿La habéis perdido o seguis conectados?
Recomendaciones
Un tema de Northern Soul que me encanta , "The Snake". Una fábula bailable sobre la seducción y la traición .Trump lo usa en sus mitines para reforzar su mensaje xenofobo.
"Slow Horses" es una serie de espías británicos con un Gary Oldman en estado de gracia de la que tenéis dos temporadas. Si os sabe a poco tenéis "Spooks" y la clásica "Calderero, sastre, soldado y espía" esta última disponible en Filmin.
Descubrí a Alena Nikolaev en la Bilbostack 2024 explicando y animando a seguir la última versión de WCAG en la que se basa la nueva directiva de accesibilidad de la EU. Me gustó su forma de comunicar, seduciendo en vez de exhortando, desde entonces la sigo en X donde enlaza artículos que me recuerdan la poca atención le presto y lo importante que es la accesibilidad web.
Algunos links:
Tuve bastantes problemas para reconciliarme con el personaje que veo en mis charlas hasta que vi este video de Ter
Me flipan estos ataúdes de fantasía que se usan en Ghana , me pido uno en forma de teclado IBM modelo 'M' hecho por Paa Joe
Un clásico de mi generación en Internet, Cory Doctorow, se pregunta que nos dejará de positivo o negativo la burbuja de la inteligencia artificial cuando estalle.
¿Podrá la inteligencia artificial seguir desarrollándose a este ritmo?
Un artículo que pone a prueba la competencia de las IA para hacer código accesible. Spoiler alert: MAL . Supongo que hay muy poco código bueno y accesible para entrenarlas.
Cada vez encuentro mas contenidos mediocres generados por una IA para posicionarse en las búsquedas.
Qué alegría leerte, Xavi :-) Qué interesantes tus reflexiones... qué nutritivo y maravilloso alimento para mi cerebro/mente :-)
Respondiendo a tu pregunta: sí, siento que he empezado a perder esa "alegría de programar", de hecho como parte de una sensación más amplia de "estar de vuelta"... lo cual ME HORRORIZA y preocupa profundamente. Pero no pasa nada, tengo planes para recuperarla y recuperarme... :-)
Qué alegría:)